No quería perderte, pero te perdía como el viento se escabulle entre mis dedos, no quería dejar de verte, necesitaba saberte bien, y en tus caídas poder sostenerte. Sentí tu fragilidad tal cómo la mía y quise entenderte, quise estar presente, aunque el mundo se detuviese, cuando el miedo te enredara en sus tinieblas, cuando la muerte te envolviera con sus falsos encantos, quería estar allí para darte la mano y no dejarte ir, a ese lugar que le temo tanto, aunque sé bien que allí cesa todo el llanto, pero, sólo reteniéndote aquí, podría mostrarte que aún hay cosas maravillosas por vivir, mientras el TIC TAC del reloj continúa su marcha, sucederán miles de cosas, muchas de ellas serán cosas buenas y sé que no querrás perdertelas, porque al fin y al cabo, vivimos de sueños.
HB 18-12-19
@Simplemente yo en letras
No hay comentarios.:
Publicar un comentario