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Como el vaivén de las olas, tus huellas en mi piel.

jueves, 6 de abril de 2017

Una Amiga nada más.

Te diste a conocer de una forma, 
me mostraste un ser que no era de verdad, 
me llenaste de ilusiones tontas
que creí verdaderas, 
lo admito me dejé engañar. 

Quizás la soledad que llevaba a cuesta  
o la inexperiencia de volver amar, 
pero creí cada una de tus palabras, 
de tus planes y tu visión supuesta
de un futuro y un hogar.

Fueron tantas cosas, 
que acepto, me gustaba escuchar,
tanto que sin estar contigo, 
me lograste enamorar. 

Pero el tiempo me mostró otra realidad, 
y vi como las palabras bonitas se desvanecían, 
esperé y lo sabes, aún seguía creyendo 
en los pocos te amos que me decías, 
traté de entender lo que en tí ocurría, 
y esa díficil situación que padecías. 

Pasé todos tus cambios de humor, 
trate de estar para ti
cuando a tu padre perdiste,
aunque acercarme no lo permitías mucho
quería estar junto a ti.

Te cerraste, estuve allí 
fue difícil pero seguí allí.
sé que tenía que esperar, 
no me fue fácil pero lo intenté, 
una vez más, creía en ti.
 
Han pasado varios años 
desde que comencé a quererte, 
y tarde me di cuenta 
de que nada era real, 
pero aun así tenía la esperanza
de que me amabas
y de esperarte un poco más. 

Te pregunté una y mil veces
tus verdaderos sentimientos, 
te pregunte una y mil veces
que si conmigo querías estar, 
te pregunte una y mil veces 
una y tantas preguntas
que nunca pudiste contestar.

Tanta falta de respuestas,
causaron su efecto en mi pensar,
se extinguieron mis esperanzas 
y mi confianza en tu forma de amar. 

Hoy te agradezco,
porque al fin fuiste sincero 
en lo que realmente quieres,
una "Amiga" nada más,
una amiga que te entienda
y que comparta contigo
que escuche tus problemas
y tus sentimientos
y que no sea solo sexo
que también sean juegos
que tu depresiones acepte
y que en tu forma vivir,
en la distancia, espere.

Que triste fue,
tu respuesta escuchar
después de tantas noches
en mi cuerpo navegar,
eso viniste a confesar.

Disculpa porque no soy 
la mujer o amiga que tú necesitas,
que esté siempre dispuesta a estar
a recibirte para charlar o para amar
porque desde ese mismo instante 
cerraste mi corazón, y me perdiste,
para nunca más regresar. 

Tengo demasiados sentimientos 
encontrados, llámalos rabia, 
dolor, amor, decepción, 
no lo sé todos juntos,
en mi mar de pensamientos
parecidos a tu eterna depresión.

Es por ello que no quería 
responder a tus llamados, 
pero hoy te escribo 
para que sepas lo que pienso, 
para que estés claro 
y no esperes  nada más de mi 
así como yo ya no espero más de ti.

Tu respuesta al fin fue clara, 
y la mía también hoy lo será, 
no quiero saber más de ti, 
no quiero que me llames ni escribas más, 
yo no soy cualquier amiga, 
ni soy una mujer cualquiera, 
yo soy yo y me quiero a mi misma,
así me quieres o así me olvidas.

Pero tú, y tu cobardía
no saber vivir en compañía
de querer sólo a ratos
aunque yo te amara tanto
de querer olvidar todo
con tan solo una llamado
pero nunca has estado 
cuando mi alma te ha necesitado.

Hoy decido 
que no te quiero en mi vida
ya no más.

A las personas se valoran por lo que son, 
y la sinceridad siempre es 
la mejor carta de presentación, 
yo fui sincera siempre, 
y siempre soy fiel a mis sentimientos, 
y hoy gana la razón y el amor por mi misma.

Te deseo lo mejor, 
deseo que aprendas amar
y que algún día puedas ser feliz 
te quieras a ti mismo,
y que aprendas a vivir
aunque sea con alguién mas. 

Fuiste una etapa de mi vida 
que siempre voy a recordar, 
y solo espero el momento 
en que el recuerdo me cause una sonrisa. 

No te odio ni te guardo rencor, 
ya no existe un lazo entre los dos, 
ya no existen motivos
para hacernos más daño 
ni para vernos los dos. 

Sin ningún resentimiento,
ni reproche ni recuerdos,
y con un fuerte dolor
hoy nos decimos adiós. 

HB  Abril 2015

@Simplemente Yo En Letras

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