Aún me duelen las madrugadas

Aún me duelen las madrugadas.

Aún me duelen las primaveras de mayo sin la fragancia que respiraba entre tus brazos.

Aún me duelen los días soleados, bajo la sombra de los árboles saboreando el dulzor exquisito del fruto de tus labios. Y aquellos días bajo la lluvia, dando saltos en los charcos.

Aún me duelen las canciones románticas, esas que se escuchan con el alma. Y aquellos libros de poesías, de los que contaban nuestra historia.

Aún me duelen los atardeceres, correteando como niños sobre los muros de una plaza. Y aquellos veranos de paseos, y los nombres que se borraron de la orilla de la playa.

Aún me duelen las noches bajo las estrellas, contando cada una de ellas. Y aquel  aroma del café por la mañana, con ese toque de canela.

Aún me duelen las hojas del otoño, que se escapan con la brisa. Y aquellas  veladas de una cena de besos y caricias.

Aún me duelen los inviernos grises y fríos, sin el calor de tu abrigo. Y éstas horas de recuerdo y olvido, que el tiempo no trae consigo.

Aún me duelen las madrugadas sin ti.

HB 28-05-19
@Simplemente yo en letras