Plática con la ausencia.

Hola, tanto tiempo sin verte

_ Si ha pasado mucho

Porqué te miro tan diferente, tus ojos marcan una acentuada tristeza, aunque tu rostro se muestre sonriente, que te ha pasado en este año, que tanto te hicieron daño, que han apagado tu alegría y te noto un poco retraía.

_ Muchas cosas ocurrieron, y te equivocas en algo, nadie me ha dañado, sólo yo me he causado daño, al esperar demasiado de las personas que realmente amo.

A qué te refieres, porqué al hablar siento tu nudo en la garganta y como tus ojos se cristalizan como queriendo llorar.

_ Esperé entendimiento cuando por malos momentos pasaba, esperé silencios y que no me juzgaran, esperé palabras de aliento cuando más las necesitaba, esperé hasta me retarán y me hicieran reaccionar, esperé compañía cuando muy sola me encontraba.

_ Esperé tanto, y desgarraba mi alma, que en tanta espera, yo misma me dañaba, esperé sonrisas, aunque otra fuera mi cara, espere que de mí se acordaran cuando yo no me encontraba, esperé abrazos sin palabras, que sanaran mis ansias, solo esperé que alegraran mi alma.

_ Pero de tanta soledad, me encerré en un abismo del cual no podía salir, debí pedir ayuda, pero por el contrario oculté mi llanto,  actué a la defensiva cuando algo decían, me mostré prepotente, obstinada, no era yo, si no mis frustraciones las que por mi hablaban, me ahogué en lágrimas que no podía derramar, me cerré en los problemas, y me alejé del mundo que me rodeaba.

_ Sólo quería una mano amiga que se acercara, y que de esa densa obscuridad me sacara, pero fui yo cuán culpable de que nadie estuviera, fui yo quien pintó de grises mis días, y di entrada a una agonía que calaba hasta los huesos, hasta donde más dolía, hasta convertirme en una muerta en vida.

Porqué no me buscaste, porqué no me llamaste, habría venido ayudarte, hablar de lo que te lastimaba, hubiera estado para ti, pero nunca acudiste a mí.

_ Si lo hice, muchas veces, pero no te diste cuenta, muchas veces cuando te saludaba, cuando poco tiempo tenías por tu trabajo, cuando en tus cosas estabas, o cuando hasta me quejaba de otras tantas, cuando a pasear no pude ir, o cuando me viste desaliñada, o cuando a mis horarios faltaba, o hasta cuando mal contestaba, andabas muy ocupada por eso no dije nada, debes saber que no sé pedir ayuda, que no se admitir que estaba mal, que es mi culpa, por no saber expresar lo que siento y querer demostrar una fortaleza que en mí nunca existió.

_ Hoy me encuentro viendo nuevamente la luz en mis días, sonriéndole  a la vida, siguiendo la corriente donde me lleve, sin luchar, por lo que ya es imposible, guardando las tristezas, ya no hay lágrimas, tratando día a día de sobrevivir en este mundo en el que debo seguir, recuperando mi seguridad perdida, dejando atrás los miedos que me acompañan, poco a poco levantándome del hoyo en el que caí.

_ Ahora no espero nada de nadie, no espero que escuchen, ni que entiendan,  no espero que estén ni que vengan, no espero abrazos ni saludos, ya no espero que esté quién no quiere estar. Pero son bienvenidos los que si quieran estar, los que quieran venir a saludar, o un fuerte abrazo me quieran dar, yo siempre voy a estar.

_ Nadie me hizo daño, solo fui yo que esperé demasiado, tal vez de cosas que yo no daba.

HB 28-10-17
@Simplemente Yo En Letras